Inmovilizador de tobillo

Causas, síntomas, tratamiento y prevención

 

 

Un inmovilizador de tobillo es un dispositivo de soporte diseñado para limitar el rango de movimiento y proporcionar estabilización de la articulación del tobillo después de un esguince o lesión. También se conoce como, órtesis tobillo-pie o tobillera. Reduce la rotación interna y la eversión del pie al tiempo que limita su flexión mediante un mecanismo de bisagra. Los beneficios incluyen un tiempo de recuperación más rápido, una reducción del riesgo de volver a lesionarse y una vuelta más temprana a las actividades habituales. Existen varios tipos de inmovilizadores de tobillo en función de sus necesidades y preferencias. Los esguinces de tobillo son una de las lesiones deportivas más comunes, especialmente entre los deportistas. En general, un esguince de tobillo se produce cuando hay un desgarro en uno de los muchos ligamentos que conectan los huesos de los tobillos, las rodillas y las caderas. Un inmovilizador de tobillo proporciona apoyo al evitar que el tobillo lesionado se mueva demasiado más allá de su rango normal durante las actividades diarias.

 

¿Cómo utilizar un inmovilizador de tobillo?

La mayoría de los inmovilizadores de tobillo se fijan con correas o cierres de velcro. Antes de ponérselo, asegúrese de colocar el pie en la posición correcta dentro del dispositivo. Los inmovilizadores de tobillo se llevan durante los periodos de descanso para aliviar el dolor y reducir la hinchazón después de un esguince de tobillo. También puede llevarse durante ciertas actividades que suponen un esfuerzo excesivo para el tobillo, como correr o saltar. Sin embargo, sólo deben usarse cuando sea absolutamente necesario, ya que pueden perjudicar la movilidad y causar molestias cuando se llevan durante largos periodos de tiempo.

 

Beneficios del inmovilizador de tobillo

Reducción del riesgo de volver a lesionarse: Los esguinces de tobillo son notoriamente difíciles de curar, y a menudo tardan entre varias semanas y algunos meses en recuperarse. Un inmovilizador de tobillo puede reducir el riesgo de volver a lesionarse proporcionando apoyo mientras los ligamentos se curan.

Tiempo de recuperación más rápido: El inmovilizador de tobillo puede ayudar a acelerar el proceso de curación manteniendo la articulación inmovilizada y reduciendo la hinchazón.

Retorno más rápido a las actividades normales: El uso de un inmovilizador de tobillo después de una lesión puede ayudar a acelerar la recuperación y permitirle volver antes a sus actividades normales, como el deporte y el trabajo.

 

Desventajas del inmovilizador de tobillo

Deterioro de la movilidad: Un inmovilizador de tobillo puede perjudicar la movilidad, sobre todo en el caso de las personas mayores y de las personas discapacitadas o con alguna afección física.

Causa irritación de la piel: Un inmovilizador de tobillo puede causar irritación de la piel, especialmente si está demasiado apretado.

Provoca debilidad muscular: Llevar una tobillera por mucho tiempo puede provocar debilidad muscular en los músculos del tobillo y de la parte inferior de la pierna, que desempeñan un papel importante en la marcha y el equilibrio.

Provoca un mayor riesgo de caídas: Un inmovilizador de tobillo puede aumentar el riesgo de caídas porque puede afectar al patrón normal de marcha.

 

Conclusión

El inmovilizador de tobillo está diseñado para proporcionar apoyo a una articulación de tobillo lesionada. Aunque puede ayudar a acelerar el proceso de curación, es importante tener en cuenta que también puede ralentizar el progreso al inhibir la movilidad y el desarrollo de la fuerza. El inmovilizador de tobillo debe usarse sólo cuando sea absolutamente necesario, como cuando se corre un alto riesgo de volver a lesionarse o se requiere limitar el rango de movimiento debido a una lesión grave. Es importante llevarlo correctamente para asegurarse de que proporciona los máximos beneficios sin causar ningún efecto secundario.


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